mater monstrum Maternidad y abyección en la ficción audiovisual argentina
Resumen
Nuestra cultura occidental ha insistido en situar la maternidad entre el telos femenino y la monstruosidad, oscilación representada en la figura de la madre mortífera que el gótico supo explotar. Se trata de una contradicción que encuentra su lectura en la semiótica de Julia Kristeva, más precisamente en su abyección: categoría que busca describir los sentidos arcaicos que anidan en ese anverso oscuro de la maternidad protectora, anudada a una idea de poder maléfico que los mitos y la cultura masiva asignaron por igual a la mujer. Tal abyección hoy parece encontrar un nuevo cauce en creaciones que, sin adherir al género del horror, retienen sin embargo cierta oscuridad en la construcción de la maternidad, tendencia constatable en algunas narraciones del reciente cine argentino. En tal sentido, filmes como El perfecto David (2021) y Las siamesas (2020) permitirán evaluar determinada sensibilidad gótica en las nuevas derivas de la madre monstruosa: aquellas que hoy exploran el carácter asfixiante de la institución familiar, las formas de la violencia simbólica y una multiplicidad de signos que, en suma, coinciden en sugerir que la toxicidad es la descripción privilegiada cuando se trata de los lazos parentales y sociales en general.